En Petit Comité

que si quieres arroz, Catalina.

Esta mañana he llegado a las 7 a currar y me he encontrado con un único e-mail en mi cuenta de correo electrónico. Se trataba del Sr. O. y copiaba su mail hasta al Lucero del Alba, incluyendo, por supuesto a su Jefe y al mio.

Glosaba su fluída prosa en cinco puntos, numerados correlativamente del 1 (uno) al 5 (cinco) y en ellos me acusaba del posible desastre que pudo haber ocurrido en su fábrica porque una de mis instalaciones no funcionó correctamente cuando se le requirió.

En mi defensa bastaría decir que la instalación en cuestión no está terminada ni entregada a fábrica, y que por tanto jamas deberían haber intentado ponerla en marcha. Pero es que el pollo, para más tocada de cojones quiere tapar sus fallos echandome la culpa a mi de la cruzifixión de Cristo.

Bien, a esto puedo responder de tres formas:

(1) Respondiendo lo que realmente opino con copia a todos a los que el Sr O ha mandado su mail y ganarme un enemigo (si no lo es ya)

(2) Pasar olímpicamente, terminar el proyecto y que se la pele.

(3) Mandarle mis padrinos y vernos las caras detras de la Iglesia al amanecer.

La opción uno, llamemosle Opción Towsend, es la que propiciaría un abogado. Juicios tengas y los ganes. La dos será la que tome y la tres lamentablemente está prohibida. Desde aquí un cariñoso recuerdo al autor de un post con con un nombre mítico "Tantos gilipollas y tan pocas balas"