En Petit Comité

Vuelvo

Este finde me bajo a Madrid. Necesito mi dosis de gran ciudad. Echo de menos
la Gran Vía. La mezcla de gentes de todo tipo a la salida de la boca de metro. Las putas, que me llaman "papito". Las chinas que venden "foltuna-malbolo" a cualquier hora de la noche. Los bakalitas con pinta de malotes de tercera regional, que también tienen su morbillo. Los divinos de la muerte. Los suaves. Los grunge. Los guiris en la cola del Mac Gay, marcando culito. El sofá azul de MI casa. Las horas tontas en el Futura de Montera buscando alguien que se anime a limpiar el sable. Los críos del Long Play. Los guapos del Gris. Los Mega Guapos del Liquid. Las Mariliendres. Los munipas en el cambio de sentido de la Red de San Luis. Los del Selur. Los X5 del Samur. Los taxistas en un Seat Toledo con 450.000 kilómetros. Las encantadoras dependientas del Horno de San Onofre y sus inenarrables Croissants. El barbas del Kebab. El asqueroso olor del restaurante Peruano de debajo de casa. Los boliardos que descojonaron durante un año los guardabarros de mi Golf. El homeless de los tres perros. "fjimenez", que se dio de baja de gaydar, pero me lo encontraba por la Gran Vía todos los meses. Que guapo es el cabrón. El chapero chino, que dan ganas de invitarle a un Big Big Mac, de anoréxico que está. El escaparate del gimnasio V35. Las tiendas de lámparas de la Calle Barco. El semáforo de Fuencarral. Los Hare Krisna el domingo por la mañana. Las locas a las que les suda el coño. Los albañiles rumanos del portal de mi casa. El olor a meado de la esquina de Telefónica. Las escaleras de Vázquez de Mella. El Nike, que ya no es el Nike. La arcada que me da cuando paso por la pescadería de la Plaza de
Chueca de resaca. Comprar El Semanal de El País en el quiosco de abajo.
Las colas de gruppies en el Madrid Rock. El Oratorio del Caballero de Gracia, que es el edificio más maricón del mundo y los Juzgados del Contencioso
Administrativo, que piden a gritos 2 toneladas de Goma 2 de puro feos que
son. El chulazo sin camiseta que se asoma a un balcón. El chaval que se da
la vuelta a mirarte el culo cuando pasas a su lado. El graffiti con el rostro de Leticia Ortiz y la leyenda "Correos en mi cara"....

Todos esos pequeños detalles que hacen que en Madrid, todo sea normal.